sábado, 4 de octubre de 2008

Huyendo de la muerte


Una madre con sus hijos cruza un rio en Binh Dinht (Vietnam del Sur) para escapar de un bombardeo norteamericano. Septiembre de 1965.
La fotografía fue tomada por uno de los mejores fotógrafos de guerra, Kyoichi Sawada (United Press International)
Félix Velasco

Una valiente

Dorothy Counts la primera estudiante negra en entrar al instituto Harry Harding High School, en Charlotte, Caroline del Norte, EE.UU, hasta ese día únicamente para blancos. Esta acción desafió la segregación, la práctica de mantener a las personas separadas de acuerdo a su raza.
La foto la realizó Douglas Moartin (Associated Press), y recoge el primer día de clase de la chica, entre gritos de “go back where you came from” (regresa al lugar de donde provienes), pero ella siguió su camino... Douglas realizó ese día una serie de fotografías, igual de crueles y humillantes, en las que se pueden observar las mofas y burlas a las que fue sometida por parte de sus compañeros.
La alumna negra que desafió el 5 de septiembre de 1957 al racismo más recalcitrante y extremo de los Estados Unidos, sólo pudo estar en aquel colegio cuatro días porque la humillaron hasta la extenuación. La tiraron piedras, la escupieron y sus propios profesores la ignoraron.
Aquel día Dorothy se despertó muy temprano, no quería llegar tarde a su primer día de clase, a sus 15 años estaba escribiendo una línea en la historia de los Estados Unidos... porque era negra.
Hasta entonces, los estudiantes negros no tenían la oportunidad de acceder a las mejores escuelas, vivían segregados. Dorothy y otros tres chicos, en otras tantas poblaciones del país, tenían aquel día una misma misión, eran los elegidos. Un peso abrumador para sus juveniles espaldas.
El segundo día no fue mucho mejor, aunque dos alumnas se acercaron para tratar de entablar amistad con ella, pero la presión y acoso que sufrieron hizo que desistieran y no volvieran a intentarlo.
El tercer día fue asaltada su taquilla del colegio, el coche de su padre ataquedao y en su casa se empezaron a recibir llamadas amenazadoras.
Finalmente su padre ofreció una rueda de prensa y la sacó de la institución
Cincuenta años después regresó a la escuela y se realizó un acto de desagravio.
Félix Velasco